En el mercado de los alojamientos web, encontrarás una amplia gama de servicios, variando también los precios. El factor precio es, en gran medida, quien determinará la calidad del servicio ofrecido. Hay hosting pagados y hosting gratuitos, si eres un usuario inicial del servicio probablemente dudes de la credibilidad de estos últimos. ¿Por qué escoger un hosting de pago, si existen también alojamientos web gratuitos? La respuesta tiene que ver con las características y cualidades de cada servicio ofrecido. Si bien no descartamos ninguna de estas dos opciones, afirmamos que la opción pagada siempre será más recomendable. Como a la vez, que un hosting gratuito puede ser útil en casos particulares y específicos.
La elección entre un servicio de hosting pagado y uno gratuito depende fundamentalmente de tus necesidades y objetivos, junto con el alcance actual y esperado de tu sitio web. Ambas opciones tienen pros y contras, la decisión final dependerá de lo que mejor se adapte a dos cosas: tu proyecto y tu presupuesto.
Revisaremos algunos aspectos clave de cada servicio, para tener un conocimiento general y poder definir con claridad qué servicio escoger.
Hosting Pagado
Algunas de sus ventajas son:
Mayores recursos:Un servicio de hosting de pago por lo general te ofrecerá más recursos y por ende, un mejor rendimiento de tu sitio web, correos, aplicación, etc. Considera que cuando inviertes en un hosting, estás invirtiendo en un mayor espacio en el disco, más ancho de banda y un procesamiento superior, que se notará en el servicio ofrecido.
Estabilidad: Si quieres un hosting que te haga sentir tranquilo, tu mejor alternativa será pagar por tu alojamiento web. Los proveedores de hosting pagados suelen ser más confiables, ya que cuentan con mejor tecnología, Datacenter propio y otras cualidades que le aportan estabilidad a tu sitio. Así evitarás que tus correos o tu sitio web presenten caídas constantes.
Soporte: Por mucho que ofrezcan, ningún servicio es perfecto ni estará exento de problemas. Por eso es tan importante el soporte. Los hosting de pago suelen tener una mejor atención, facilidad de acceder a los canales de ayuda y disposición para solucionar problemas técnicos 24/7. Si vas a pagar, revisa que el servicio de hosting cuente con atención en tu idioma, idealmente telefónica.
Personalización: Pagar proporciona más libertades y un mayor control en las configuraciones del servidor y la tecnología utilizada. Podrás adaptar con facilidad las herramientas de tu alojamiento web a tus necesidades específicas. Esta es una cualidad valorada en proyectos personalizados o de gran tráfico, quienes generalmente optan por soluciones superiores de alojamiento web (como VPS o Servidores Dedicados).
Seguridad mejorada: Los proveedores de hosting de pago tienden a invertir más en sus medidas de seguridad. Si buscas una protección sólida y robusta contra amenazas online, considera pagar por el servicio. Elementos básicos que mejoran en gran medida la seguridad son los Certificados SSL, antivirus y antispam.
Desventajas del hosting de pago:
Valor: Principalmente la variable precio es la gran desventaja. Hay servicios de hosting demasiado caros para quienes están partiendo. De todas formas, el valor del hosting varía según el proveedor y el plan elegido. Hay muchas empresas de alojamiento web que tienen planes iniciales bastante accesibles.
Conocimientos: Algunos servicios de alojamiento web de precios más elevados, por su naturaleza, están pensados en usuarios con un grado base de conocimientos técnicos. Considera que mientras más específica sea la solución de hosting, más exigente será el conocimiento del servicio ofrecido. Aun así, los servicios de hosting de pago suelen ayudarte con un buen soporte.
Hosting Gratuito
Entre sus ventajas encontramos:
Ahorro: Lo principal es que es a costo cero. No tendrás que pagar un peso por tu servicio de alojamiento web, lo que te permite hospedar un sitio en internet sin ningún pero. Ahora bien, la diferencia es si funciona o no. El hosting gratuito puede ser funcional en pequeños proyectos web o sitios de prueba, cuyas fallas no te hagan tener pérdidas significativas de prestigio o dinero.
Posibilidad de escalar: Muchos alojamientos web que consideramos de buena gama, ofrecen planes escalables, incluyendo una versión gratuita para poder probar el servicio. Por lo tanto, un plan gratuito puede darte una experiencia general del servicio de hosting en el que luego vas a invertir.
Desventajas del servicio:
Recursos limitados: Los hosting gratuitos suelen limitar los recursos de tu plan, dándote lo más básico. Es posible que más temprano que tarde, tengas problemas de rendimiento en tu web y correos, como lentitud de navegación, bloqueos de IP, sitio inseguro, o correos que no llegan a destino por falta de espacio. Por lo tanto, el hosting gratis NO es una opción para sitios web de alto tráfico.
Publicidad invasiva: Si te preguntas de dónde obtienen recursos, muchos hosting gratuitos lo hacen poniendo publicidad en los sitios web que hospedan. ¿Has visto sitios donde la navegación es lenta, llena de banners o pop ups con publicidad al hacer clic? Esto es consecuencia del hosting gratis. La publicidad es molesta para los ciber usuarios y puede reducir las visitas en tu sitio, además de restarte puntos en Google.
Menos control: Tendrás menos control en la configuración general del servicio, limitando no solo los recursos, sino también, tus opciones de personalización.
Soporte reducido: En los hosting gratuitos el soporte es bajo o a veces nulo. Si suceden problemas, que como hemos visto, es probable, este tipo de empresas tardan en responder.
Servicio inseguro: Los servicios de hosting gratuito a menudo cuentan con menos medidas de seguridad, no garantizan backups, certificados SSL, etc. Tu sitio web estará vulnerable a ataques online. Además, si la empresa cierra, lo más probable es que lo haga sin darte un respaldo de tu sitio.
En resumen, ambos servicios de hosting pueden utilizarse, pero debes saber cuál elegir. Si tu proyecto web es fundamental para tu negocio y buscas que te de confianza, estabilidad y un buen soporte, opta por un hosting de pago; si no tienes grandes recursos, puedes buscar hospedajes web con planes básicos o iniciales de bajo costo. Ahora bien, si quieres experimentar un servicio accesible en el corto plazo, un hosting gratuito puede ser conveniente en casos específicos.