Elegir un nombre de dominio es uno de los puntos más importantes a la hora de crear tu sitio web y lanzarlo al mundo. Aunque el dominio es un servicio que se contrata por un tiempo limitado y se renueva, lo ideal es que a lo largo de todo el ciclo de vida de tu marca o negocio, tu dominio no cambie.
Un nombre de dominio es la dirección única para llegar a cada sitio web. No existe marca digital que tenga el mismo nombre de dominio que otra, por muy similares que sean, ya que los dominios se registran.
El dominio se conforma de dos partes: el nombre del sitio y la extensión. Ambos suelen dar luces sobre la naturaleza del servicio, su ubicación geográfica, etc. Podemos ejemplificarlo con nuestra marca:
Planetahosting.cl → Nuestro dominio / .cl nuestra extensión para Chile
Planetahosting.pe → Nuestro dominio / .pe nuestra extensión para Perú
Planetahosting.com.co → Nuestro dominio / .com.co nuestra extensión para Colombia
Como puedes ver, la extensión varía según la necesidad. En nuestro caso, la extensión es elegida por ser la más utilizada para cada país, por preferencias locales. El .com se usa bastante para las empresas de alcance global.
Ahora bien, qué tan importante es la elección del dominio y cómo puede aportar beneficios u oportunidades a tu marca, es lo que revisaremos en este artículo.
El porqué de un dominio memorable
Dar con el nombre de dominio correcto, es de cierta forma, encontrar ese dominio memorable, aquel que logre reforzar tu marca y quedar en la mente de los potenciales consumidores, ayudándolos a encontrar tu web. Asimismo, puedes optar por nombres sencillos y genéricos que definen la esencia o naturaleza de tu marca, incluso la categoría misma, posicionándote como líder en tu nicho, por un hecho tan simple como haber registrado el dominio correcto antes que el resto.
Si quieres encontrar el nombre de dominio perfecto para tu web, apuesta por uno que sea memorable, relevante y efectivo. Si no sabes cómo, te entregamos algunos pasos simples y amigables que puedes revisar para inspirarte y reflexionar.
PASO 1: Comprende el dominio y su importancia
Si bien no es algo grave y por el contrario, elegir un dominio puede ser estimulante y divertido, al momento del registro es clave que comprendas por qué es tan relevante. Imagínate que creas para ti un nombre similar al de otra marca, esto podría hacer que, en vez alcanzarte, lleguen a tu competencia. En otro escenario posible, podría restar seriedad o prestigio: Te imaginas si hay un ColaCola.cl en vez de un CocaCola.cl, ¿confiarías en esta marca?
Procura elegir tu nombre de dominio cuidadosamente y una vez que lo tengas, asegúrate de registrarlo antes que otros lo hagan. El resto será mantenerlo activo y renovarlo cada vez.
PASO 2: Haz un brainstorming
¿Te suena el término? Un brainstorming es una lluvia de ideas, es decir, el momento donde la creatividad aflora en su máxima expresión. Los brainstorming pueden ser solitarios o en equipo y suelen ser muy útiles en la búsqueda del dominio perfecto. Crea esa instancia donde permitas que las ideas fluyan, no importa lo raras que sean, solo permite que sean. No es el momento de limitar o filtrar. Puedes inventar juegos, mapas, combinaciones de palabras, sinónimos y antónimos, lo que se te ocurra en el momento. También puedes valerte de inspiración de otras marcas y tecnología IA. Verás como se te abrirán puertas a posibilidades que luego podrás filtrar con tu mente más racional y objetiva.
PASO 3: Mantenlo simple
El mejor nombre de dominio no es el más detallado, profundo o complejo. Al contrario, piensa en lo instantánea y veloz que es internet. Con esa misma velocidad querrás que se posicione el nombre de tu sitio en la mente de los ciber usuarios. Cuando hablamos de nombres de dominio, menos es más. Tu dominio ha de ser corto, fácil de pronunciar y de escribir, lo suficientemente simple para quedar en la memoria de todos, o de la mayoría. Si vas a apostar por un nombre largo, recuerda hacerlo memorable. Puede ser algo muy único, cómico, innovador o pegajoso. Te recomendamos evitar los caracteres inusuales, como los guiones o puntos, ya que costará más fijarlos en la mente. Las personas también suelen confundirse con los números, sin saber si se escriben en palabras o letras.
PASO 4: Averigua si está disponible
Camarón que se duerme se lo lleva la corriente… esto también aplica a la hora de registrar tu dominio. Si encontraste el dominio de tus sueños, no te duermas. Basta con tener una idea aproximada de tu nombre online y ya podrás Googlear o revisar en sitios especializados los registros de dominios. Busca si existen sitios con dominios similares, investiga la disponibilidad y la legalidad. Es importante que no pierdas tiempo en casarte con nombres de dominio que otros ya registraron. Trabaja sobre un lienzo en blanco, aún si sea difícil encontrarlo; desde nuestra experiencia sabemos que siempre hay un dominio único disponible para ti, solo debes dar con él. Aléjate de nombres de dominio que puedan ser acusados de fraude o involucrarte en dificultades o problemas legales.
Existen más elementos, como escoger la extensión apropiada, pero no buscamos profundizar ni complejizar. Creemos que estos puntos te harán más fácil la tarea y podrán ayudarte con tu decisión, para que logres dar con esa identidad digital memorable, sólida y efectiva y plasmarla en tu dominio.